CICLO DE INDICACIONES DIETÉTICAS
PARA DESINTOXICACION DEL CUERPO
Segunda parte:
A continuación de la primera parte del ciclo que publiqué ayer cuatro de abril, dos mil quince. Hoy os dejo la siguiente indicación practica.
Alimentación durante ciclo de desintoxicación.
Durante el proceso de desintoxicación, usaremos el vehículo con que
mayormente cuenta el organismo= EL AGUA
Lo primero, por la mañana, nada
más abrir los ojos beber agua pura. Tomar un sorbo generoso de agua y mantener
en la boca esta agua mañanera durante un buen rato. Tomar varios buches del
mismo modo. Esto repone e hidrata las zonas más delicadas del Sistema
Inmunológico.
El resto del tiempo, de
preferencia beber solo agua pura y/o también
infusiones sin azúcar de ninguna especie. Cualquier tipo de azúcar
enlentece gravemente todo proceso de curación.
ALIMENTO.
El cuerpo en proceso
de desintoxicación esta casi incapacitado
para digerir nada, los tóxicos mantienen al hígado en estado de
agotamiento, de manera que el cuerpo amerita una dieta blanda, eminentemente
LIQUIDA.
Son indicados los caldos,
los zumos de verduras = hojas verdes, crudas: rucula, acelgas, espinacas, canónigos, berros, a las cuales se
les puede adicionar rabanitos y apio verde.
Ahora bien, en esta etapa,
la BASE DEL ALIMENTO será
El batido de
HÍGADO FRESCO de vacuno.
En su carnicería de confianza cada dos días, adquiera absolutamente fresco, un pequeño
filete de hígado de vacuno. Pártalo en cuatro partes
( debe
durar para dos días) Mantenga en la nevera, no en frízer.
Dos veces por día licuar la
cuarta parte de este filetillo acompañado de frutas de estación de su agrado.
Queda muy bien con fresas, frambuesas, maracuyá y así con las frutas de su
gusto. Recomiendo adicionar un pequeño
chorrito de vino dulce seco, tipo Oporto y
( opcional) esta vez sí un poco de
miel de caña de azúcar tipo melaza.
Este preparado tan vigorizante,
nutritivo, asimilable, digerible suele quedar muy sabroso y como dije antes,
constituirá la gran ayuda alimentaria durante las primeras etapas del proceso
limpiador.
Según cuan fuerte se
vaya sintiendo el paciente, se irán
adicionando algunos sólidos a su dieta.
La clave está en dar al
organismo agotado, el menor trabajo posible, vale decir, comida cruda, líquida,
licuada. Obviamente no servirán los horarios habituales, sino más
seguido: cada dos o tres horas. Pero
siempre, la disposición del paciente dará las pautas.
En próximas publicaciones ahondaremos
exhaustivamente en la forma de alimentarse durante y después del proceso de desintoxicación.
Por ahora ¡suerte y
salud!
Comparto con ustedes amigos indicaciones también para el alma, escritas por el amoroso JEFF
FOSTER.
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